HEMEROTECA
20 abril, 2020
2o.04.2020 Stengel Ibérica ofrece sus minicocinas y cocinas compactas para cuando se desea montar una cocina minimizando el coste inicial y apostando por la rapidez, la calidad, el diseño, la higiene, y la sostenibilidad…
Estos productos, tal como asegura la compañía, tienen un ámbito de uso muy amplio. No se emplea la misma cocina en una caseta de obra que en un apartamento vacacional, en un exterior o para una casa en la montaña. Por ello, la empresa cuenta con diferentes líneas de modelos con precios, equipamiento, apariencia y diseño muy variados. Pero siempre con la misma garantía: su larga vida útil.
Importancia de la higiene
Además del diseño, la calidad y la sostenibilidad, la actual crisis sanitaria nos ha enseñado a valorar la higiene mucho más que antes. Las minicocinas y cocinas compactas de Stengel son de metal, por lo que se emplea únicamente chapa de acero y acero inoxidable. El acero inoxidable es resistente a la corrosión y a los ácidos, no se oxida pese al vapor de agua y otros agentes humectantes o climáticos. Además son fáciles de limpiar y de higienizar. Esto es porque estas superficies son lisas, no porosas y antibacterianas.
Asimismo, todas las piezas están fabricadas en las instalaciones de la empresa y pintadas en polvo. Esta pintura aumente notablemente la resistencia de las superficies, comparada con el barnizado húmedo habitual. El metal pintado en polvo es inodoro, lo que hace que estas cocinas siempre huelan a limpio, según Stengel.
Sostenibilidad y rapidez
La compañía también pone el acento en sus materiales, 100 % reciclables y sin sustancias nocivas. Contribuyen así a la salud y al uso sostenible de los recursos naturales. Disponen de la certificación ecológica DIN EN 14001, y de la certificación máxima de aprovechamiento de energía en sus electrodomésticos.
Para acabar, instalar una minicocina no llevará más de 30 minutos. Tan sólo hay que conectarla a las tomas de agua y electricidad.
*Para más información: www.stengel-iberica.es
