HEMEROTECA
28 febrero, 2020
28.02.2020 Conseguir una cocina de ensueño no es tarea fácil. Después de analizar el espacio disponible y el estilo que más define, el usuario debe decidirse por el mobiliario. Tal como recuerda AMC (Asociación de Mobiliario de Cocina), los muebles tienen mucha importancia en esta zona de la casa. De hecho, la cocina suele ser la estancia con más mobiliario por metro cuadrado. Por eso, elegir su color suele ser una decisión de peso.
Ahora mismo, la tendencia hacia los tonos alegres y combinados entre sí es cada vez más creciente, y consigue dotar a esta estancia de un mayor protagonismo. Por eso, los expertos de AMC sugieren algunas opciones que pueden servir de inspiración para conseguir una cocina actual y con encanto, gracias a la mezcla ideal de tonos y texturas, con estilo y originalidad, reflejando la personalidad y brindando bienestar a habitantes e invitados.
Neutros o pasteles
Los colores discretos, como los pasteles, son una muy buena forma de empezar a colorear la cocina. Además, aportan un toque de dulzura y luminosidad. También, los neutros, como el gris, están cada vez más de moda y permiten múltiples combinaciones con otros tonos o con madera natural.
A cuentagotas
Para usuarios que no esté preparados para conceder más protagonismo al color en los muebles de la cocina, se puede introducir a cuentagotas en otro tipo de mobiliario más fácilmente intercambiable, como en las sillas de los office, en algunos estantes, o incluso en elementos decorativos… Dará un toque divertido a la cocina sin que se deba arriesgar demasiado. Estos toques de color son ideales para combinarlos con unos muebles en tonos neutros.
Paredes con color
Otra opción para añadir alegría a la estancia, es pintar las paredes con tonos más vivos, pero manteniendo los neutros en los muebles (el color blanco y la madera natural son siempre una buena elección).
En revestimientos y azulejos
Otra opción muy recurrente es reservar el color para los revestimientos, como azulejos o encimeras. Esta alternativa siempre es un acierto si se busca originalidad. Además, se puede regular la cantidad de color, optando sílo por un frente o por toda la cocina.
La vitalidad del amarillo y el verde
El amarillo es vida, optimismo y vitalidad, valores que deberían estar cada vez más presentes en el corazón de las viviendas, y que son muy importante para fomentar la creatividad. En cuanto al verde, es una magnífica opción en piezas de último diseño y uno de los colores más propios del estilo vintage y de los primeros diseños industriales. Además, combina muy bien con verdes más intensos, diferentes amarillos, tierra y distintos tipos de madera natural.
Contrastes vibrantes
Para los más valientes, el contraste entre colores vibrantes es una opción que conseguirá un efecto, sin duda arriesgado, pero único y especial. El verde agua combinado con fucsias y amarillos forman un conjunto cromático perfecto para aportar a la cocina un look muy singular.
Rojo pasión
El rojo ya fue tendencia años atrás en un tipo de mobiliario lacado y con brillo, pero ha vuelto de nuevo ahora, combinado con tonos neutros o contrastado con blancos, negros o marinos. No hay duda de que la viveza del rojo se relaciona con cocinas con gran personalidad. Además, otorga calidez al espacio y, según expertos en la materia, despierta el apetito.
Classic Blue
Pero el color ganador de esta temporada es el Classic Blue, elegido como el como Color del Año 2020 según Pantone, lo que supone la vuelta a una tonalidad atemporal que expresa tradición y elegancia. Formica es una de las compañías que más rápido se ha unido a esta tendencia con su laminado Marine Blue, una gama ligeramente más oscura y sofisticada del azul clásico. En combinación con otros colores, funciona extraordinariamente con otros de su misma paleta o con similares tonos azules.
Tierras y maderas
La combinación de diferentes muebles en colores tierra es un buen ejemplo de cocina moderna que aporta a su vez un toque de calidez y la hace más acogedora. Además, gracias a sus tonos tan naturales admiten interesantes contrastes entre los neutros (grises o blancos) o los pasteles (en tonos incluso rojizos, amarillos o verdosos) junto con el marrón oscuro, creando espacios llenos de frescura y paz.
Cabe destacar que la diferencia entre seleccionar un acabado en brillo o en mate (sobre todo en colores lisos como blancos, cremas, azules o naranjas), intentando lograr el el equilibrio entre pavimento, revestimientos, encimeras y mobiliario, es esencial para conseguir resultados muy diferentes.
En resumen, elegir el color de la cocina transformará esta estancia de forma radical. Y estos consejos de AMC seguro que ayudarán a conseguirlo.
*Para más información: www.amcocina.com
