Una cocina abierta de color blanco, en el nuevo proyecto de Anabel Soria

El estudio Anabel Soria Arquitectura e Interiorismo ha diseñado la reforma de una vivienda de 100 m2 en la localidad madrileña de Alcorcón: el proyecto AM Home. La reforma ha transformado el antiguo piso en un espacio funcional y lleno de carácter para una familia de cuatro miembros.

Así, el proyecto ha integrado recibidor, cocina y salón en un solo espacio, como centro del hogar. También ha contemplado actuaciones en dos dormitorios, despacho y dos baños. El objetivo era responder a las necesidades de sus propietarios, combinando la versatilidad del teletrabajo y el crecimiento de los más pequeños con un entorno acogedor.

En cada rincón de la casa se percibe la implicación de los clientes, que han seleccionado piezas de diseño con un sello muy personal, creando un equilibrio perfecto entre estética visual y confort diario.“El proyecto destaca por la fusión de estilos: molduras y piezas vintage conviven con elementos más contemporáneos e industriales, como el pilar en bruto que estructura el espacio entre la cocina y el salón. Una combinación armoniosa que da como resultado un hogar único, con identidad propia, pensado para vivirlo en familia y compartirlo con amigos”, explica Anabel Soria.

La cocina abierta, protagonista del proyecto de Soria

“Uno de los grandes retos del proyecto fue unificar recibidor, cocina y salón en un único ambiente, pero sin perder ni funcionalidad ni estética. De concepto abierto, el espacio se estructura en torno a una columna en bruto, que descubrimos tras el derribo del tabique que originalmente separaba la cocina del salón. Su singularidad industrial aporta carácter y actúa como una sutil delimitación entre zonas”, explica la interiorista. De esta columna nace una isla alargada de más de dos metros, que integra la placa de cocción, taburetes elegantes orientados hacia el salón y mucho almacenamiento en el extremo opuesto. Frente a la puerta de entrada, una librería de madera da una cálida bienvenida al entrar en casa.

La trasera de la cocina se compone de un imponente mueble de suelo a techo, optimizando el almacenaje sin saturar el espacio. La zona del fregadero, ubicada junto a la ventana y el lavadero, rompe la uniformidad del mobiliario con estantes de madera, pensados para arrojar ligereza y colocar elementos decorativos.

El predominio del blanco se matiza con contrastes: electrodomésticos en negro, baldas de madera sobre el fregadero y un alicatado decorativo en su trasera, y fregadero y tiradores en dorado. Para reforzar la sensación de amplitud, sencillez y limpieza, se opta por una campana empotrada en el techo y una iluminación integrada.

En este proyecto la cocina es de Kibur, la encimera de Dekton, la campana extractora de Pando y el resto de electrodomésticos, de Ikea.

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*Para más información: https://www.instagram.com/estudioanabelsoria/

Cocina Integral

14.04.2025